lunes, 10 de octubre de 2016

Los del puro.

Por lo que sé (poco) sobre la guerrilla de Colombia, parece que hay dos cuestiones que se me antojan inaceptables:
1)  Asesinos inmisericordes quedarían libres de toda culpa.
2)  De salida, las FARC tendrían "de facto" una representación en el Parlamento.
Viendo las fotos que se han publicado, donde se puede ver a los mandatarios de las FARC cómodamente instalados en La Habana y sin privarse de fumarse unos purazos acojonantes, tal cual, me pregunto, ¿que tienen que ver estos individuos con los guerrilleros que entregan su vida en las selvas de Colombia?, y me respondo, nada.

Lo de siempre, el pueblo llano de uno y otro lado se juega la vida, civiles-militares (de bajo rango)-guerrilleros, y los políticos-militares (de alto rango)-gerifaltes de la guerrilla, se juegan los puros, es decir, status, poder político, dinero, etc.