jueves, 7 de julio de 2016

Dios los cría y ellos se juntan.

Me da lo mismo Messi que Menno, eso si no me gustan los defraudadores, y  parece que el primero va a tener que dejar por incomparecencia la selección argentina, a no ser que le den permisos de tipo tercer grado.
Pues los jueces se han pronunciado en contra del criterio de la fiscalía y a favor del criterio de la abogada del Estado, exdirectiva madridista, que sostenía, con gran contundencia, que Messi (futbolista de 19-20 años y sin preparación académica), tenía que saber lo que firmaba y que lo de confiar ciegamente en su papá no le servía de excusa.
Si el juez ha dicho que Messi, además de haber pagado lo que defraudó con un recargo casi del 100% es culpable del delito de fraude fiscal, acátese la sentencia sin rechistar, pero esperemos que se actúe con el mismo rasero, por ejemplo, con la señora infanta de España, licenciada en empresariales y empleada de la Caixa, cuyo argumento de defensa, incluso para la fiscalía y hasta para la Abogacía del Estado, que no se personó en la causa contra ella (???), es que no sabía lo que firmaba porque confiaba plenamente en su marido.

Si no fuere así, habrá que darle, por enésima vez, la razón a Pedro Pacheco en aquello de que "la Justicia en España es un cachondeo".