viernes, 26 de septiembre de 2008

Mandela y la Reina

El burro, se encariñó de doña Sofía, durante la visita de la soberana a su Fundación, en Rute (Córdoba).

El cariño que la reina Sofía siente por los animales, y nos consta que en Palacio está rodeada de muchos, como hemos visto en más de una ocasión, este le es correspondido al menos por el burro Mandela.

Lo hemos vuelto a comprobar durante la visita de la soberana a las instalaciones de la Fundación Casa del Burro. Allí, ha bautizado con anís a 'Lluvia', un burrito con poco más de un mes de vida, que está, junto con otros 40 pollinos, bajo el cuidado de la Asociación para la Defensa del Borrico, Su Majestad, afirma que tendría que haber más burros en España, aunque yo creo y esta es mi modesta opinión que precisamente en España lo que sobramos (Sálvese el que pueda) somos burros.

Doña Sofía, que fue recibida y acompañada en su visita a la 'Casa del Burro' por su presidente Sr. Pascual Rovira, principal responsable de la citada fundación, y por las burras y burros locales, no dudó en acercarse a los pollinos, que viven entre pinares y excusados de por vida de cualquier tipo de trabajo, o sea que como dice el refrán, El Burro cuando está alegre, rebuzna y pee, así se la ponían a Felipe II.

La Reina hizo liga con todos, pero el mayor acercamiento lo tuvo con 'Mandela'. La Reina llegó a dejarse 'rascar' la espalda por 'Mandela', mediante movimientos rítmicos de la cabeza del animal, al que llegó a dejar que la 'besase' en una mejilla, animada, entre risas, por el ejemplo que le dio Rovira, quien le confesó que el secreto de la obediencia y amabilidad de 'Mandela' radica en los muchos bombones con los que lo premiaba, siguiendo con los refranes dice este que "El que da rosas de comer al burro, cobrará con un Rebuzno.

Su majestad, quien dijo estar dispuesta a llevar a sus nietos a conocer los burros, conoció a alguno de los pollinos que Adebo regaló a la Casa Real, en concreto un par de burritos a cada una de las infantas y también a los príncipes Felipe y Letizia, con motivo de sus respectivas bodas, o sea que en la casa Real actualmente también hay burros.

Y para terminar solo quiero deciros que es de broma que no y para que nadie se de por ofendido diré que hablo de presuntos burros. Para burro, burro el alcalde de mi pueblo, ¡qué burro tiene que ser!, para mandar en nosotros, que semos más burros que él.