jueves, 17 de abril de 2014

Los diputados se van de vacaciones... de nuevo.


Imaginen la siguiente oferta de trabajo. Se ofrece puesto remunerado con más de 3.000 euros, compatible con otras actividades privadas, tres días de trabajo a la semana y casi dos meses de vacaciones en Navidad, un puente de dos semanas a finales de febrero, 18 días en Semana Santa y dos meses en verano. La asistencia al tajo no es obligatoria salvo en casos puntuales.
Esta podría ser, a grandes rasgos, la percepción que muchos ciudadanos tienen de sus representantes en el Congreso de los Diputados.
Tras regresar del extenso puente del que sus señorías disfrutaron en febrero por los comicios vascos y gallegos, los diputados vuelven a marcharse de vacaciones por la Semana Santa. En esta ocasión, el periodo de asueto se extiende desde este viernes y durante los próximos 18 días -hasta el 21 de abril-.
Reforma de la Constitución
El pasado mes de febrero, los grupos del Congreso dieron los primeros pasos para tratar de reducir en alguna medida las llamadas "vacaciones parlamentarias", períodos sin actividad ordinaria en la Cámara que viene determinado por lo establecido al respecto en la Constitución.
"Las Cámaras se reunirán anualmente en dos períodos ordinarios de sesiones: el primero, de septiembre a diciembre, y el segundo de febrero a junio", recoge la Carta Magna.
La reducción de las vacaciones en el Congreso podría obligar a reformar la Constitución
La portavoz del PP en la Cámara Baja, Soraya Sáenz de Santamaría, invitó a las demás fuerzas políticas a la búsqueda de alguna fórmula para lo que ella denomina "normalizar" la actividad en el Congreso, donde no hay plenos ordinarios ni comisiones en enero, en julio y en agosto.
Los grupos acordaron encargar a los servicios jurídicos de la Cámara la elaboración de un dictamen que recoja las posibilidades para aumentar la actividad de los diputados tanto en enero como en julio, respetando agosto como mes inhábil.
La propia Sáenz de Santamaría reconoció que los cambios que el PP demanda podrían obligar una reforma de la Constitución, aunque también es posible abordarlos únicamente con un cambio del Reglamento de la Cámara e incluso por un simple acuerdo político.
De Enero a Junio solo trabajan 41 días, habrá que cambiar aquel famoso refrán que decía tienes más vacaciones que un maestro de escuela, por el de tienes más vacaciones que un diputado.