domingo, 16 de febrero de 2014

La Telomerasa.

Las células de nuestro cuerpo no pueden ser inmortales porque poco a poco se degradan y dejan de hacer su función. En ese momento se inmolan y dejan paso a nuevas células. El indicador de la inmolación es el acortamiento de los telómeros que es un simple contador hacia atrás de las divisiones celulares. 

Para que todo vaya bien en nuestro cuerpo la  telomerasa sólo tiene que estar presente en células de la línea germinal, en tejidos fetales y en ciertas células madre poco diferenciadas, porque es en estos casos, donde se tiene que permitir el alargamiento de los telómeros. Si esta encima la detectamos en otros tipos de tejidos es una señal muy probable que estemos ante un posible desarrollo cancerígeno. 

Por lo tanto, la telomerasa tiene que ser reprimida en las células somáticas maduras (son las células que no son germinales) después del nacimiento para que en cada división celular se vaya produciendo un acortamiento del telómero y la célula deje ser inmortal. 

Las únicas células inmortales son las células de la línea germinal, que perduran de generación en generación a lo largo de la vida de una especie, y que por tanto son, esencialmente, inmortales.

Para que nos hagamos una idea, las células germinales son las que dan origen al esperma y a los óvulos y son inmortales en el sentido de que, tras la fertilización, son capaces de dar lugar a todo un organismo maduro completo compuesto de células mortales (conocidas como células somáticas en contraste con la denominación de células germinales) y a más células germinales que retendrán la capacidad de volver a generar de nuevo todo un organismo completo.

Aquí esta el quid de la inmortalidad: nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos... así sucesivamente hasta que la especie desaparezca. Habrá una sola célula de nuestro organismo que será inmortal si tenemos hijos y nuestro hijos tienen a su vez hijos,....


Con respecto a la corrupción es como la inmortalidad, hay que contrarrestarla acortando los telómeros y los políticos tienen que dimitir como se inmolan las células de nuestro cuerpo. He puesto de ejemplo los países del sur de Europa porque son los casos donde hay telomerasa, es decir impunidad. En el resto de países del norte de Europa la  telomerasa es reprimida y los políticos se inmolan cuando se les imputa en cualquier caso de corrupción.