Lo que no reconocen la oligarquía de los partidos
políticos que tenemos en todo el territorio nacional, ni creo que lo reconozcan
nunca, a menos que se derrumbe el sistema, que también puede ser, y la unidad
de España, es el enorme gasto y problemas de toda índole que genera el estado
de las autonomías. No lo reconocen ni lo reconocerán porque es donde más y
mejor se nutren (económicamente), donde mejor pueden colocarse la mayor parte
de ellos para vivir del Estado toda la vida, sin ningún problema económico, por
eso difícilmente podrán reconocer esto.
Nadie puede discutir a estas alturas que el Estado
Autonómico está en crisis, por eso surgen los problemas que tenemos con todas
las autonomías en general, unas protestan más y otras menos, pero con todas hay
problemas de financiación, de déficit, de inversiones del Estado,
educacionales, etc., en una palabra, de recursos para pagar los gastos que al
ir por separado se generan y para solucionarlo, con parches, tienen que coger
dinero de donde lo tengan, impuestos, Seguridad Social, enseñanza, etc. justo
lo más necesario en un estado moderno.
Lejos de solucionar los problemas, suprimiendo el estado
autonómico o centralizando muchas de sus competencias, ahorrando gastos y
problemas, algunos partidos políticos, para contentar a los nacionalismos y
premiarlos por sus hazañas y protestas o bien porque algunos les va en ello su
subsistencia, pretenden dar un paso más hacia delante con el estado federal o
plurinacional, ósea más de lo mismo, pero a peor.
No es de extrañar que con estas premisas ocurra lo que
está ocurriendo en Cataluña, el País Vasco, Valencia, por nombrar alguna de las
que más protestan.
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