martes, 10 de abril de 2018

Cuando no tenemos las cosas claras.


 Por alguna razón, que nos impide pensar con claridad, coherencia y libertad, buscamos la justificación de nuestras actitudes y acciones con las que no nos sentimos a gusto pero que, por algún motivo, consciente o inconsciente, no tenemos el valor de rechazar.
Los poderes del Estado, con el gobierno a la cabeza, los financieros, empresariales, tecnológicos y medios al servicio del capital y el poder. Nos inundan día a día con datos e informaciones en su mayor parte falsas o manipuladas para controlar, manipular e infundir a todos los ciudadanos, al pueblo en general, la confusión, la inseguridad, el miedo y el engaño para hacernos participar a todos los dominados de lo que, sin lugar a duda, es una inmoralidad e injusticia de los que nos dominan. Como es el caso de la reducción progresiva del poder adquisitivo de las pensiones y por tanto del empobrecimiento de una parte muy importante y desprotegida de la sociedad.
Especialmente desde el gobierno, las finanzas y los medios nos dicen que no hay dinero suficiente para la sostenibilidad de las pensiones, que cada vez hay más jubilados, que vivimos más años, que hay menos nacimientos, etc., etc. o, recetas como las del FMI, que dice que para garantizar las pensiones hacen falta más inmigrantes y más ahorro privado.
Todo ello está en caminado, sin duda, a socavar las mentes de los ciudadanos y llevarnos progresivamente hacia lo que se llama la servidumbre voluntaria, nos quieren hacer partícipes y consentidores de sus inmoralidades, egoísmos e injusticias, manipulándonos.
Dicen que no hay dinero para las pensiones, pero lo que no hay son principios, ni moral ni ética de los que tienen el poder. Por qué haber dinero si hay para rescatar bancos, autopistas quebradas, financiar partidos políticos, mantener duplicidades en las administraciones públicas (central y autonómicas), etc., etc. Lo que está claro es que las pensiones no forman parte de sus prioridades. Primero los intereses del poder y las finanzas y después, hasta donde llegue.
Donde está la credibilidad y la lealtad del Sr. Rajoy y del PP a todos los ciudadanos de este País y en especial a sus votantes que, prometió, entre otras cosas, que no tocarían las pensiones ni la seguridad social. Desde el 2012, los jubilados pagamos el 10 % de las recetas de la SS, aparte de los medicamentos que se han sacado fuera y ahora no entran con las recetas, y desde el 2014 la revalorización de las pensiones es del 0,25 % todos los años. Además, a los que se jubilen a partir de año 2019 se les rebajara un porcentaje en su jubilación por aquello de la sostenibilidad. Donde está la hucha de más de 66.000 M. de € que había en la SS.
Si los que están en el poder fueran demócratas o tuviera un poco de vergüenza y dignidad, muchos de ellos habrían dimitido ya hace tiempo.