Trinidad Jiménez, que por cierto sigue formando parte del
Comité Federal del PSOE, o sea, está en un órgano que tiene en su mano la toma
de decisiones políticas, se incorpora a Telefónica, y parece ser que trabajará
en la sede que la multinacional tiene en Madrid, en el llamado distrito C,
donde la socialista tendrá un despacho como ejecutiva de la empresa:
Preguntado por el caso, el líder del PSOE D. Pedro Sánchez
ha respondido: Que "no es a ningún Consejo de Administración ni nada que
tenga que ver con eso", ha dicho, sino que es "como una trabajadora
en la compañía".
Eso sí, tan lógica, tan normal, tan respetuosa con los
cánones de los buenos usos resulta esta incorporación, que se está retrasando
dada la actual coyuntura política, para no perjudicar las negociaciones de D.
Pedro Sánchez.
Y no se alcanza a comprender el retraso en el nombramiento,
ya que es comúnmente conocido que no tiene nada que ver ni se parece en nada a
los casos Zaplana, Urdangarín, Rodrigo Rato y tantos otros, hay una profunda
diferencia, abismal diferencia, y no es otra que, en este caso se trata de un
destacado miembro socialista, y eso claro está, lo cambia todo.
Tan es así, que cuando fue nombrado Eduardo Zaplana,
evidentemente PP, corrieron ríos de tinta, pero cuando fue incorporado Javier
de Paz, ex-dirigente de las Juventudes Socialistas, ni los ríos llevaban agua,
ni los tinteros tenían tinta, ni prácticamente fue de conocimiento de casi
nadie.