Si fuera simpatizante-seguidor-militante socialista, es
evidente que no lo soy, me preguntaría justamente como el título, y es que
viendo el panorama político desde luego desde la parcialidad, que siempre
procuro que sea lo más disminuida posible, estaría muy preocupado por la
deriva, mejor derivas en plural, que el histórico partido está teniendo en los
últimos tiempos.
Y digo "derivas" porque depende a que dirigente se
escuche los mensajes son contradictorios, cuando no directamente opuestos. Tan es así, que los resultados electorales
son desde hace ya algunos años altamente preocupantes hasta que desembocaron en
el "hemos hecho historia" (90 escaños) que proclamó a los cuatro
vientos el actual secretario general, Pedro Sánchez.
Y eso que se venía de una marca difícil de superar, la de
Alfredo Pérez Rubalcaba, pero así es, de victoria en victoria hasta la derrota
final, o sea, hasta que el partido más inconsistente de los que han sido y son,
no me atrevo a decir serán, tiene todos los visos de poder superarlo.
Y eso que si no se tienen luces para verlo, o
deliberadamente no se quiere encender la luz del entendimiento, bastaría con
mirar al otro lado del Mediterráneo, la historia ya está escrita, solo hacer
falta leerla. Efectivamente, el PASOK
en Grecia podría dar buena cuenta de ello, pero nadie se molesta en
preguntarles.
Confieso que desde hace un tiempito ya no me preocupa en
absoluto, el PSOE habrá opositado con todos los merecimientos al lugar que mas
que probablemente le tocará.
Y lo que será todavía más delirante, "PODEMOS" no
ahora, no en unos meses, quizá algunos años, acabará semi-pactando con la
derecha, esa historia también está escrita, esa aquí, en España.
En fin, todos tenemos derecho a equivocarnos por nosotros
mismos, y Pedro I "El Decente" más que nadie.