lunes, 10 de diciembre de 2018

Algunos puntos de vista sobre las pensiones.


Muchos políticos y medios de comunicación nos cuentan que la sostenibilidad de las pensiones y su revalorización con arreglo al IPC, todos los años, no se puede llevar a cabo con las cotizaciones a la SS de los que están en activo. Y así parece que es, con los sueldos de miseria que en muchos casos se cobra, con la precariedad del empleo y el paro que tenemos, y pagando, con el dinero recaudado, partidas que deberían ser pagadas con los PGE. Pero es que además si no hay suficiente dinero con lo que se recauda con las cotizaciones de los activos para pagar las pensiones, que se tire de los PGE, como se hace para otras tantas cosas, menos importantes y menos necesarias que las pensiones y para la mayor parte de la sociedad.
Subir los impuestos a los bancos, empresas, a las grandes fortunas y a los que más ganan o cobran sueldos astronómicos, está muy bien, pero si luego no se les controla y se deja que hagan lo que quieran, se les permite que suban las comisiones y precios de sus productos y servicios; si no se controla a los que más tienen, a los poderosos para que no evadan impuestos. Las subidas de impuestos que anuncian al final repercutirán en el pueblo llano, en nosotros, y no servirán para nada. Por tanto, no basta con subir los impuestos a los que más tienen, para repartir mejor la riqueza del país y para que haya dinero para el mantenimiento y actualización de las pensiones hay que controlarlos para que no haya abusos y evasión de impuestos.
También hay que gestionar mejor los recursos del Estado, que no son infinitos, pero si suficientes si se reparten con más racionalidad, eliminando duplicidades administrativas que no sirven para nada, excepto para crear problemas; dando menos subvenciones a los partidos políticos, sindicatos, asociaciones empresariales, fundaciones y un largo etc.; y haciendo más transparente la gestión pública para evitar en lo posible las corruptelas que tanto nos cuestan.
Todas estas cosas seguro que no son del agrado de la mayor parte de los políticos y de muchos de sus seguidores, menos aún del gobierno, posiblemente no las consideren políticamente correctas, pero mucho me temo que no hay mucho donde elegir. O se atienden las necesidades de primer orden de la mayor parte de los ciudadanos como son las pensiones, la sanidad pública y la enseñanza, entre otras, o se sigue favoreciendo a ciertas clases elitistas, jerárquicas o dominantes de la sociedad.
Muchos pensionistas estamos convencidos de que nos asiste la razón y el derecho para hacer las reivindicaciones que hacemos, como son: la actualización de las pensiones con arreglo al IPC todos los años, la retirada de lo que llaman el factor de sostenibilidad, la suspensión del copago de los medicamentos, y la derogación de los coeficientes reductores a los que hayan cotizado más de 40 años, aunque por alguna causa se tengan que jubilar antes de la edad reglamentaria. Estas, entre otras, son las reivindicaciones y de no ser atendidas por los grupos políticos y/o el gobierno, lo mínimo que podemos hacer, aparte de seguir manifestándonos, siempre que podamos. Es tomar nota de ello para pagarles con la misma moneda en las próximas elecciones.