La líder y portavoz de la oposición municipal en el
ayuntamiento e Madrid, doña Esperanza Aguirre, ha anunciado que va a demandar
ante los tribunales el cierre temporal de la Gran Vía al tráfico de vehículos
privados. Declara que esa medida, que califica de esperpéntica, cutre,
vergonzosa e indigna, pisotea los derechos de los ciudadanos y es “inconcebible
en una ciudad occidental”.
En ocasiones, cuando leo según qué cosas, me pregunto si
algunos personajes públicos -de los que esta señora es el paradigma- son
manifiestamente… bueno, me ahorraré los calificativos.
Ignoro si alguien, después de esos alardes verbales de la
Sra. Aguirre, se habrá tomado la molestia de poner en su conocimiento, si es
que ella misma no lo ha leído ya en varios medios, que hay múltiples casos de
vías públicas, céntricas e importantes, de algunas ciudades, tan céntricas e
importantes como la Gran Vía de Madrid (algunas más) que se peatonalizan
temporalmente en Navidad y/u otras épocas del año o bien que ya son peatonales
de forma permanente. Por citar solo cinco ejemplos:
- Oxford Street (Londres)
- Times Square (Nueva York)
- Via del Corso (Roma)
- Rue Neuve (Bruselas)
- Rúa Augusta (Lisboa)
Conforma a las reflexiones de la muy informada y documentada
Esperanza Aguirre, esas ciudades, al parecer, no son "occidentales",
sino que deben de estar por ahí, en Oriente Medio, el Sudeste Asiático o el
África Subsahariana. Por lo menos.
Como no se había dado por satisfecha la buena señora, esta
mañana, oyendo la radio mientras desayunaba, casi se me cae la tostada encima
de la taza de café con leche, cuando la he oído decir, de su propia voz, en
unas declaraciones públicas de ayer, que se trata de “una medida ideológica,
propia del perfil político de quienes gobiernan en el Ayuntamiento de Madrid”.
Llevo todo el día que "vivo sin vivir en mí",
sobre todo después de que, buscando un poco (muy poco) por los cajones del “Tío
Guguel” he encontrado algunas informaciones con datos y fotos ciertamente
interesantes, como las dos que reproduzco más abajo, que muestran sendas
imágenes de Times Square, la célebre vía de Manhattan, a la que, en febrero de
2009, de forma experimental, las autoridades municipales neoyorkinas
peatonalizaron en una parte y en la otra la dejaron solo para tráfico de
transporte público y, con muy severas restricciones, para algunos vehículos
privados. Ante los resultados satisfactorios del "experimento", el
Ayuntamiento de Nueva York decidió
dejarla así, con carácter permanente, desde un año después, el 11 de febrero de
2010.
Times Square (muy conocida, pues ha aparecido en bastantes
películas) es, como probablemente muchos sabéis, una vía ancha (casi en forma
de plaza) del centro de Nueva York, en la que confluyen la Séptima avenida y la
Avenida Broadway, y es la más emblemática, comercial y turística de esa ciudad
de los EE.UU., cuyo alcalde, a la sazón, Michael Blomberg, debía de ser -según
los criterios de Esperanza Aguirre- un esperpéntico, cutre, bolivariano y
comunista de los que dan miedo.