La Sra. Manuela Carmena, esa misma que jura y perjura que no
es de "Podemos" no para de deleitarnos con ideas de largo alcance, el
Ayuntamiento de Madrid procederá a repartir 38.000 ceniceros de bolsillo para
nada más y nada menos que contribuir a la limpieza de la ciudad. Todo ello en el marco, que por palabras
grandilocuentes no quede la cosa, de una nueva fase del plan de sensibilización
para el cuidado del espacio público.
O sea, si damos por buena la cifra de que Madrid tiene
aproximadamente algo más de 3 M. de habitantes, y podríamos deducir que de
ellos puede haber 1 M. de fumadores, la resultante está clara:
1.000.000 fumadores - 38.000 ceniceros portátiles = 962.000
habitantes fumadores quedaran desprovistos de tamaño artefacto benefactor.
Parece ser que además, esta campaña de sensibilización
contará con "acciones pedagógicas" en el tejido comercial de los 21
distritos. Así, está previsto distribuir cerca de 50.000 dípticos que resuman
la ordenanza de limpieza. Estos folletos informativos están editados en cuatro
idiomas: castellano, árabe, francés y mandarín.
Es llamativo que no se haga en inglés, lengua universal
donde las haya y que llegaría a un universo de personas muy amplio.. Es más, y en catalán, porque que será de mí
si se me ocurre darme una vuelta por la villa y corte, y no estoy "al
loro" de las últimas novedades sobre materia de limpieza.
Lo de Dª Manuela y las colillas, recuérdese la brillante
idea de crear un concurso en que los niños compitieran por recoger colillas de
las calles, empieza a ser preocupante.
Sin duda alguna, están todos al borde de un ataque de
nervios por las injerencias e interpretaciones del Ayuntamiento, y varios de
ellos han vuelto a fumar después de años de abstinencia.
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