Entre 1936 y 1945, el saludo fascista, brazo en alto, fue
oficial en la España franquista y era obligatorio hacerlo por todo aquel que
estuviera presente en cualquier acto o lugar público en el que sonara el himno
nacional.
Esa es la razón por la que se ve a todo Dios con el brazo en
alto en muchas fotos, por ejemplo, de partidos de fútbol y corridas de toros,
sin se escaparan de hacer el saludo ni los futbolistas, ni los toreros e,
incluso, en algunas fotos, puede contemplarse a obispos con el brazo en alto.
No es que todos ellos fueran franquistas convencidos e
hicieran el saludo fascista a iniciativa propia, es que era inexcusablemente
obligatorio hacerlo, so pena de sufrir las consecuencias si no lo hacías,
fueras quien fueras.
La obligatoriedad de hacer el saludo fascista, allí donde
sonara en público el himno nacional, llegaba hasta extremos tan surrealistas y
esperpénticos, como que, si en una escena en mitad de una película sonaba el
himno nacional, todo el público del cine tenía que levantarse de las butacas y
hacer el saludo brazo en alto mientras durara el himno.
Esa obligatoriedad del saludo fascista en actos y lugares
públicos se derogó, en España, el 11 de septiembre de 1945, poco después (oh,
casualidad) de que acabara la 2ª Guerra Mundial con la derrota de los nazis y
fascistas.
A partir de entonces, el saludo fascista dejó de hacerse en
estadios de fútbol, plazas de toros, conciertos, salas de cine, etc… pero
siguió haciéndose en otros ámbitos, como en los actos del régimen y en muchos
colegios, incluso hasta bien avanzados los años 50 y comienzos de los 60…
cuando en España no se “adoctrinaba” a los niños…
Como decía alguien sobre otro asunto, qué suerte hemos tenido
algunos de vivir dónde y cómo hemos vivido... a lo que yo añado y
"cuándo" hemos vivido, aunque no haya sido toda nuestra vida.
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