Después de que Ernest Benach, presidente del Parlamento de Cataluña, renunciara a su escaño han aparecido algunos detalles económicos de su retiro.
Por ejemplo, cobrará un sueldo de más de 100.000 euros anuales durante los próximos cuatro años a costa de nuestros impuestos, sin necesidad de trabajar ni hacer nada y, además, cuando se jubile, recibirá una pensión de casi 80.000 euros tras haber estado sólo siete años en su cargo; es decir, cobrará diez veces más ahora dedicado a la política, que si hubiera seguido ejerciendo su antiguo oficio de jardinero, es decir que este señor ha hecho una buena elección, muy listo sí señor, encima ahora hasta lo trataban de honorable, ah por supuesto su Audi oficial no le ha faltado claro.
Un pensionista español medio tiene que cotizar 35 años para una mísera pensión.
Estoy de acuerdo con la reforma de las pensiones, pero de todas porque de momento la de los políticos no se tocan, luego se preguntan por qué se les llama la casta política.
En plena crisis económica y con más paro que nunca, embolsarse estas cantidades
a costa del contribuyente es inmoral. Eso para el que tenga moral, porque me parece que no tienen ni dignidad ni vergüenza torera. Así nos luce el pelo
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